domingo, 10 de abril de 2011

Who knows me better.

Esta vez parece que no me hace falta hacer recuento en fin de año, me vale con unos pocos meses.
Todo ha cambiado, y cuando digo todo, es TODO. Pero...¿quien dijo que los cambios fuesen malos?
Hace años que no estaba tan bien, en todos los sentidos de mi vida.
Me levanto con sueño, pero no agotada. Voy a clase sin ganas, porque es un coñazo, no porque no quiera salir de casa. Me duermo en el bus, porque tengo sueño, no para que pase el tiempo mas rapido. Lo paso lo mejor que puedo en clase, me lo tomo con calma y a risa, no me desespero ni paso de entrar porque se que me voy a poner de mala leche. No me cabrea la gente, ignoro a los que me molestan, disfruto de mis amigos, de sus cosas buenas y les intento ayudar en lo que puedo sin olvidarme de mi. Llego a casa con pereza, no con ganas de meterme en la cama hasta el dia siguiente. Sigo sin ganas de estudiar, pero lo hago (o por lo menos lo intento). Me apetece moverme, estar activa, hacer ejercicio (aunque sea pasear), no pasarme la tarde en la cama oyendo musica. Poco a poco voy llevandome mejor con mi madre, o pasando mas de ella, no lo tengo muy claro, pero es mejor asi, no me derrumba cada cosa que me dice. Paso mas tiempo con mi familia y me siento feliz con ellos. Me acuesto con ganas de dormir y levantarme al dia siguiente y ademas, duermo bien el 98% de los dias... ¿Que mas puedo pedir?

Gracias.
Pero mejor que decirlo es demostrarlo, solo espero estar haciendolo.